Hoy dedicamos nuestro podcast al seguimiento médico, visitas de rutina, controles, pruebas y demás, durante los 9 meses de embarazo. Lo decidimos así en respuesta a un comentario que nos dejó Gloria, que aquí os adjuntamos y que nos pareció interesante abordar:
Gloria: – Maravilloso, compañeras. Hoy me he escuchado los tres últimos episodios del tirón. Maravilloso todo lo que nos traéis para pensar y cuestionarnos y maravilloso es escuchar vuestras experiencias, tan diferentes, pues de todas las vivencias podemos aprender.
Quiero preguntaros, como mamás experimentadas que sois, antes del parto, ¿qué hay del seguimiento del embarazo? ¿Cómo lo vivisteis vosotras? ¿Centros de salud y controles habituales en el médico o visitas acordadas con la matrona elegida? ¿Qué podéis compartir al respecto?
Mil gracias y larga vida a vuestros podcasts.
Hablamos de las ecografías, amniocentesis, analíticas, test de O’ Sullivan y cuestionamos la necesidad de hacer tantas pruebas y controles. Cada una de nosotras transitó de forma distinta estos meses, y lo que una entendió como «lo normal», la otra entendió que eran demasiadas pruebas, y la otra, que hizo un seguimiento más relajado, tuvo que correr por un diagnóstico de reflujo en el feto. Son nuestros personajes los que nos llevan a actuar de una u otra forma. A elegir un seguimiento y parto medicalizado, con todo controlado, donde cada mes nos digan, desde afuera, lo que toda mujer conectada con su esencia debería sentir… que el embarazo va bien! con todas las pruebas que eso conlleva, o a salir un poco de la autopista y permitirnos cuestionar la lógica de ciertas practicas y ver si son necesarias y desde dónde lo decimos. Los automáticos (maneras de actuar que nos salen sin pensar y no sabemos de dónde nos vienen) de cada personaje son poderosos, y es lo que vamos a tratar de mostrar en sucesivos podcast.
Recordad, el próximo 22 de enero… conversaciones con Laura Gutman
Gloria dice
Mil gracias por atender mi consulta, chicas. Habéis tocado todos los puntos que bullían en mi mente; no sólo los médicos, controles y pruebas sino especialmente los miedos internos, las dudas, las discusiones con las parejas (porque ellos no están de acuerdo, porque creen que debemos hacer otra cosa…), los comentarios de familiares y amigos… ¡Y la necesidad de empoderarnos como mujeres en favor de nuestros niños y por las niñas que fuimos!
Muchas gracias por vuestros aportes y nos vemos y abrazamos en breve 🙂