Muy buenas a todo el mundo y bienvenidas a nuestro podcast, en el que cada episodio sacamos algo en claro de nuestro ser esencial, gracias a la metodología de la Biografía Humana. Esperamos que os guste esta charla y que hayáis aprendido algo más sobre la lactancia. Muchas gracias por vuestras valoraciones de 5 estrellas en iTunes, por vuestros Me Gusta en Ivoox, y por compartirlo en redes sociales, whatsapp…, y especialmente por estar ahí, al otro lado, haciéndonos compañía.
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Hoy hablamos de Lactancia. El reflejo de succión es junto con el llanto las dos herramientas que traen de serie todos los bebés. Ahora bien, si venimos de un parto maltratado, como hemos visto en el episodio 2, muy probablemente no estemos en condiciones de sostener al bebé y lo único que queramos sea dejarlo en la cuna y descansar. Pasa que lo único que la lactancia necesita para establecerse con éxito es justo eso. Que el bebé esté encima del cuerpo de la madre desde el mismo momento de nacer. Porque a partir de los primeros 20 ó 30 minutos, este reflejo empieza a perder fuerza. Sólo así, el bebé puede reptar por el cuerpo de la madre, oler y encontrar el pecho, agarrar el pezón y succionar. Si el bebé está en su cunita, o en la nurserie, esto deviene imposible. También se necesita intimidad para la diada madre-bebé, como en cualquier acto amoroso. Y si tenemos a los abuelos, amigos y vecinos por la habitación la tarea resulta harto complicada.
Contamos nuestra propia experiencia que como siempre es diferente en los tres casos. En dos partos se estableció desde el primer momento, en otros dos no. Lactancias fallida, mastitis, cesáreas que hacen imposible este primer encuentro, y luego se convierte en un desencuentro con el bebé, que rechaza el pecho…
Hablamos de la dificultad de sostener los dos primeros meses para las madres, por varios motivos: Primero, porque el tandem mama-bebé tiene que empezar a conocerse, la subida de la leche, el calostro, la segregación de prolactina. Segundo porque el bebé tiene que regular con la succión, el flujo de leche, para conseguir sólo la que él necesita, las crisis de crecimiento y Tercero porque el nivel de cercanía emocional, y cuerpo disponible a jornada completa es algo que no hemos recibido y por tanto nos parece imposible poder ofrecer. Y esto no tiene nada que ver con la voluntad. Si no tomamos conciencia de nuestro desamparo en la primera infancia, nos va a ser difícil sostener de manera amorosa la lactancia.
Hablamos también de las leches de formula (de vaca)y los biberones. De la Nestlé y las 3h entre tomas, de los suplementos y nuestra necesidad de constatar lo que el bebé va tomando. Del desconocimiento de muchos profesionales, y de la mayoría de las mujeres, que no sabemos que los tiempos, el tipo de cacas, el peso y el sueño de los lactantes, difiere de los percentiles creados para los bebés que toman biberón. Este malentendido provoca mucho malestar y abandono prematuro de la lactancia.
Nos atrevemos a romper el mito de que hay mujeres que no tienen leche. Para generar la leche que necesita nuestro bebé lo único que tenemos que hacer, es ponérnoslo al pecho. Cuanto? Cada vez que lo pida, y esto incluye las noches.
Hacemos mención a :
Daniel y la teta, de Julieta Bazán
Un regalo para toda la vida, de Carlos González
https://www.youtube.com/watch?v=cih52UaQMfg